El Poder Ejecutivo sometió al Congreso Nacional un paquete fiscal que impactará sobre los activos de los bancos comerciales, las operaciones de juegos de azar, el sector turístico y el mercado inmobiliario, así como sobre los consumidores y beneficiarios de dividendos.
La iniciativa legislativa, que tiene el objetivo de aumentar los ingresos fiscales y, en caso de obtener excedentes, destinar una décima parte a inversión en educación, establece el cobro de un impuesto de 10% sobre las operaciones brutas de todas las bancas deportivas, de apuestas, de loterías, de juegos de azar, casinos y máquinas tragamonedas.
La medida también abarca a las operaciones brutas de las empresas que hacen rifas por la vía telefónica y por Internet, las cuales, además, serán reguladas por el Ministerio de Hacienda.
Este impuesto unificado afectará a los casinos de las zonas turísticas, pues aclara que se aplicará “sin tomar en consideración la localización donde se desarrolle la actividad”. En forma adicional, se establece el cobro de RD$300,000 por el registro inicial de las operaciones de las nuevas bancas deportivas.
Se establece pasar a la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) la administración y gestión del cobro de los impuestos correspondientes a esos sectores.
En cuanto a los servicios de telecomunicaciones, la propuesta legislativa, remitida por el presidente Leonel Fernández al Senado de la República, incluye el cobro de 10% de selectivo a los servicios de televisión por cable, que hasta ahora están exentos de ese gravamen.
Para el sector financiero se establecen dos medidas, una de exención, proponiendo la reducción escalonada del impuesto de 0.15% sobre las transacciones financieras, que bajarán a 0.10% en el primer año, 0.05% en el segundo, y 0% en el tercer año de aplicación.
Sin embargo, plantea el cobro de un impuesto de 1% sobre todos los activos de las entidades financieras, incluyendo los créditos bancarios, lo cual podría empujar a un aumento automático de las tasas de interés para compensar esa carga.
El Gobierno propone también reducir de 25% a 10% el impuesto a los dividendos, pero con la desventaja de que ahora ese gravamen no podrá ser deducible del impuesto sobre la renta que pagan los emisores, con lo que se convierte en un impuesto definitivo sobre esas operaciones.
Para los propietarios de bienes inmobiliarios, la propuesta del Gobierno inicia con ampliar la exención del impuesto a las viviendas suntuarias y solares (IVSS) de RD$5 millones a RD$6 millones. Pero con el agravante de que el impuesto de 1% sobre el valor que supere ese monto se aplicará al propietario de los bienes, no al inmueble. Esto quiere decir que, por ejemplo, si una persona tiene dos inmuebles que están valorados en RD$3.5 millones cada uno, se le computará la propiedad de RD$7 millones y tendrá que pagar el 1% sobre RD$1 millón excedente.
La propuesta fiscal también propone volver a aumentar de 0.5% a 5% la retención que hacen las instituciones del Estado centralizadas, descentralizadas y autónomas sobre todos los pagos de bienes y servicios que realicen, excluyendo sólo el servicio telefónico.
La medida también abarca a las operaciones brutas de las empresas que hacen rifas por la vía telefónica y por Internet, las cuales, además, serán reguladas por el Ministerio de Hacienda.
Este impuesto unificado afectará a los casinos de las zonas turísticas, pues aclara que se aplicará “sin tomar en consideración la localización donde se desarrolle la actividad”. En forma adicional, se establece el cobro de RD$300,000 por el registro inicial de las operaciones de las nuevas bancas deportivas.
Se establece pasar a la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) la administración y gestión del cobro de los impuestos correspondientes a esos sectores.
En cuanto a los servicios de telecomunicaciones, la propuesta legislativa, remitida por el presidente Leonel Fernández al Senado de la República, incluye el cobro de 10% de selectivo a los servicios de televisión por cable, que hasta ahora están exentos de ese gravamen.
Para el sector financiero se establecen dos medidas, una de exención, proponiendo la reducción escalonada del impuesto de 0.15% sobre las transacciones financieras, que bajarán a 0.10% en el primer año, 0.05% en el segundo, y 0% en el tercer año de aplicación.
Sin embargo, plantea el cobro de un impuesto de 1% sobre todos los activos de las entidades financieras, incluyendo los créditos bancarios, lo cual podría empujar a un aumento automático de las tasas de interés para compensar esa carga.
El Gobierno propone también reducir de 25% a 10% el impuesto a los dividendos, pero con la desventaja de que ahora ese gravamen no podrá ser deducible del impuesto sobre la renta que pagan los emisores, con lo que se convierte en un impuesto definitivo sobre esas operaciones.
Para los propietarios de bienes inmobiliarios, la propuesta del Gobierno inicia con ampliar la exención del impuesto a las viviendas suntuarias y solares (IVSS) de RD$5 millones a RD$6 millones. Pero con el agravante de que el impuesto de 1% sobre el valor que supere ese monto se aplicará al propietario de los bienes, no al inmueble. Esto quiere decir que, por ejemplo, si una persona tiene dos inmuebles que están valorados en RD$3.5 millones cada uno, se le computará la propiedad de RD$7 millones y tendrá que pagar el 1% sobre RD$1 millón excedente.
La propuesta fiscal también propone volver a aumentar de 0.5% a 5% la retención que hacen las instituciones del Estado centralizadas, descentralizadas y autónomas sobre todos los pagos de bienes y servicios que realicen, excluyendo sólo el servicio telefónico.
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